Aunque tiene ya sus añitos, esta canción se ha hecho famosa recientemente. Ha sonado en las televisiones, en todos los informativos y muchos más programas gracias a un bailarín ilustre: Mamadee.
El pequeño tenía razones para bailar (haber superado el ébola) y además mucho arte en las venas.
Pero me atrevo a decir que la versión que tiene cautivado al pequeño Mamadee no es la original del artista nigeriano Iyanya sino una versión llamada African Zombie que es todo lo cerca que voy a llegar del fenómeno Halloween. Seres que vuelven del más allá para menear la cadera con exquisito ritmo y casi barrer la frontera entre dos géneros de música popular contemporánea africana "coupé décalé" y "azonto".
Y reconozco que yo también les imito (con mis limitaciones) bayeta en mano.
Os dejo las dos versiones, para que las disfrutéis. Ya me diréis cuál os gusta más.
Feliz fin de semana.